miércoles, 12 de enero de 2011

Otro paseo por el del Delta de L’ Ebre.


Moritos comunes

Siguiendo el rastro de nuestros compañeros Judith y Mikel y aprovechando los pasados festivos nos acercamos unos días al Delta del Ebro, humedal que no visitábamos desde hace años, del que presentamos aquí una visión complementaria a la de nuestros compañeros y que describe nuestro paso en fechas con la veda abierta pudiendo servir de comparación sobre el aspecto que ofrece un espacio natural antes y durante la temporada cinegética. 

Garceta grande
Como todas las zonas deltanas, la del Ebro, es una inmensa extensión plana en donde se han ido sedimentando los materiales arrancados a lo largo de la cuenca y arrastrados hasta aquí.

Superficie muy humanizada con agricultura dedicada a los cítricos en la zona basal más cercana a Amposta y arrozales en las extensas tierras del este, que intentan colonizar el mediterráneo.

Moritos comunes
El hemidelta situado al norte contiene buenas poblaciones de Gaviotas picofinas y zonas de depósitos limosos (El Fangal) donde, según nos dijeron, suele haber poblaciones interesantes de limícolas que la mala suerte no nos permitió ver. En la prominencia que más penetra en el mar se encuentra la Isla de Buda, finca privada a la que no se puede acceder y en donde la actividad cinegética prima sobre cualquier otra cosa.


Calamón

Desde el observatorio elevado con que está dotado el lugar se pueden ver buenos bandos de Tarros blancos en la lejanía y otras anátidas difíciles de identificar aunque se use un buen telescopio. Suponemos que la fuerte distancia que separa este punto de observación de los cuerpos de agua en donde descansan los patos se justifica no tanto para salvaguardar a las aves sino más bien para evitar molestias a los cazadores.

Moritos comunes
En la mitad sur del delta se encuentra La Tancada y la Encanyssada que aglutinan las poblaciones de Flamenco común. Aquí también está la finca que SEO/BirdLife explota a través de los cultivos ecológicos de Riet Vell. Buenas poblaciones de Calamón común, Pato colorado, frecuente el Martín pescador, Aguilucho lagunero, algún Zarapito real y junto al observatorio Aguila pescadora invernante. Gran cantidad de Garza real, Garceta grande invernante, Garceta común, Garcilla bueyera y alguna cangrejera. Gaviotas reidoras, Avefrías muy abundantes.

Buitrón
También tuvimos la suerte de admirar importantes grupos de Morito común volando en formación por toda esta parte del delta.

Flamencos comunes
La rica gastronomía de la zona se adorna con los mejores arroces a la paella que se pueden degustar en nuestro planeta. Si te ven como de confianza te ofrecen arroz con Focha que por supuesto no probamos.

Gorrión molinero
Sin que los informes de los responsables de conservación del delta nos influyan, debemos confesar que la impresión que recibimos de nuestra reciente visita ha sido la de haber visitado un humedal en declive como espacio natural. Las urbanizaciones (algunas al parecer ilegales) y los cultivos extensivos ocupan el 80% de la superficie del parque natural.

Flamencos comunes

La salinización, hundimiento y la pérdida de territorio por el avance del mar preocupan porque aunque los éxitos en la concienciación medioambiental de residentes y visitantes, en la reproducción de especies como el Flamenco y en el impulso de los cultivos ecológicos contrasta con la desecación de amplias zonas y la extracción ilegal de turberas a pesar de ser un hábitat prioritario para la UE. Preocupa la invasión de especies exóticas como el llamado caracol manzana (Pomacea canaliculata, creo) que llega al delta por el Ebro sobre el que se vierten todos los residuos procedentes de los aficionados a la acuriofilia y que ha obligado a desecar la mitad norte del hemidelta para combatir esta invasión con la merma consiguiente en las poblaciones de aves.


Garza real

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