miércoles, 29 de septiembre de 2010

DELTA DE L´EBRE

Paraíso para las aves y ¡para el ornitólogo! Un lugar donde el agua y el arroz son los protagonistas. Un delta en el que la conservación y la producción agrícola van de la mano. Humedales, canales, arrozales,… todo sitio es bueno para la observación de las aves.

Entre canales y arrozales se ve con facilidad Garcilla cangrejera, Garceta común, Garceta bueyera y Garza real. Hace falta más suerte para conseguir ver a la ardeida imperial. Los Fumareles cariblancos recorren los canales a velocidad de vértigo e incluso juegan a esquivar los coches de aquellos que tenemos el placer de circular por la zona y poder observarlos tan de cerca. Desgraciadamente, no todos lo consiguen.


La margen derecha del Ebro tiene varios humedales muy interesantes, que permiten observar Charrán patinegro, Águila pescadora, Aguilucho lagunero, Archibebe común, Archibebe oscuro, Zarapito real, Avoceta, Cigüeñuela, Ánade friso, Cerceta carretona, Pato cuchara, Zampullín común, Gallineta común, Somormujo lavanco y como no, el protagonista del Delta, el Flamenco, en grandes cantidades, con un plumaje precioso y un color intenso que pide a gritos una foto!


La Isla de Buda, zona especialmente protegida, nos ofreció una mañana intensa. Lo más destacado y emocionante: Morito común, Ganso común, Espátula y Calamón. Y como despedida una Garcilla bueyera “pescando” una serpiente, con su consiguiente pelea por darle muerte y final triste para la Garcilla, puesto que al final se le escapó. Un espectáculo de la naturaleza que tuvimos la suerte de observar.

Garcilla bueyera – Lertxuntxo itzaina - Antes y después de la derrota


Hemendik, Delta de L’Ebre bixitatzea gomendatzen dizuegu, ez zarete damutuko!
                                                  Mikel eta Judith

sábado, 25 de septiembre de 2010

AVES DINAMARCA JULIO/AGOSTO 2010

Os voy a llevar a una playa danesa, donde cada verano tengo la suerte de pasar mis vacaciones. Esto año ha sido durante los meses de julio y agosto. Se trata de un sitio muy especial. Para llegar a la playa, hay que pasar unos 200 m de bosque con pinos, abetos, robles y abedules. Luego se sale a terreno abierto con unos humedales muy bonitos. Por unos puentes se llega a una playa de dunas, algo salvaje - una zona muy conocida por su riqueza de aves.




Este año, la primavera ha sido mucho más fría que lo normal y muchas aves se han ido a otros lugares más idóneos, pero siempre queda algo por que alegrarse.

Cada día las Palomas Torcaces nos visitaban en nuestro terreno.






También los Picapinos venían muy a menudo, siempre avisándonos de su llegada con un grito corto y agudo o dejándose notar por su tamborileo repetido. Hay que admitir que nos servimos de bolas de comida en los arboles para atraer a nuestros amigos. Si no, todos van a casa del vecino.




Los Trepadores se dejaban ver muy a menudo, visitando su pino favorito. ¡Con qué facilidad suben y bajan por los troncos! Nos dejaban ver muy claramente su pecho y el centro del vientre de color blanco y no como aquí que tienen un color cobrizo.


En el bosque se ven o se oyen muchos parajitos pequeños (Pinzones, Carboneros Comunes y Lúgubres, Herrerillos, Reyezuelos, Verderones, Camachuelos, Pardillos Comunes, Mosquiteros Comunes, Mirlos, Agateadores y Escribanos Cerillo).

 
 


Pero lo que más llama la atención es la riqueza y la diversidad de aves que se juntan en la playa. Durante la salida del sol están ahí muy tranquilas y es el mejor momento para observarlas. Nadie las molesta, ya que servidora se mueve muy discretamente. Están a lo suyo, que es comer y comer. Se ven bandadas bastante grandes de Gaviotas Reidoras, Charranes, Cormoranes y un montón de Limícolas (Ostreros, Chorlitejos, Chorlitos, Avefrías, Correlimos Gordos, Archibebes, Agujas y Zarapitos). También las lavanderas se encuentran muy a gusto entre los pequeños arbustos de hierba que hay en la arena y no paran.




No obstante, el pájaro que más se pasea por todas las partes – en la playa, cerca de los jardines y en el campo de trigo – es la corneja cenicienta. Arma siempre escándalo y la gente la tiene manía, no menos por romper los nidos de los pajaritos pequeños, lo que de todas maneras no quita que es un ave impresionante.






Y no vamos a olvidar los Patos. Siempre hay algún Tarro, muchos Azulones, algunas parejas de Serretas y algún Cisne. Y como en todas partes, también ahí se ven las Fochas defendiendo sus territorios. Este año había pocas Garzas, pero en vez tuvimos la suerte de ver una Lechuza Campestre sobrevolando el humedal. Fue precioso ver su vuelo tan bajo y tan silencioso.

 



A finales de las vacaciones, se apreciaba como los Estorninos, las Avefrías y los Ansares Comunes se iban juntando, preparándose para el gran viaje al sur. Estaban inquietos.



Viviendo ahí una temporada es una gozada. Te sientes muy cerca de la naturaleza tan bella que hay en nuestro planeta y no hay un día sin ver algún ciervo, liebre, faisán o zorro. ¡Ojala siga todo así y que cada día haya más gente dándose cuenta de que tenemos que cuidar todo aquello al máximo!


miércoles, 22 de septiembre de 2010

Maratón Ornitológico Euskadi 2010

EL Gran Reto es un concurso nacional, organizado por SEO/BirdLife, que se celebra en otoño y reúne a los equipos que han resultado campeones en los Maratones Ornitológicos nacionales que se celebran anualmente en primavera, en cada una de las CCAA. En esta oportunidad se celebrará en Vitoria – Gasteiz, tendrá su ámbito de actuación toda la Comunidad Autónoma Vasca y se ha invitado a participar a los diez equipos mejor clasificados.

domingo, 19 de septiembre de 2010

El Paso migratorio por los alrededores de Gasteiz

Hemos tenido un verano seco en Alava y las expectativas no parece que nos deparen un otoño húmedo. Malo para los humedales continentales.



Realmente un lugar como Salburua en donde los freáticos profundos afloran en superficie por colmatación, lo normal es que en verano se seque. Sin embargo, esta año después de una invierno muy largo, la acumulación de agua en los estratos permeables era muy alta y ha habido que abrir lo drenajes para poder intervenir sobre los fondos para decapar el exceso de vegetación, según tenían programado sus gestores. Ahora se necesita una buena temporada de lluvias para que se recupere el freático y vuelva a aflorar de nuevo para reclamar a las poblaciones de pájaros que normalmente nos acompañan durante el invierno y la otoñada.


Ayer y coincidiendo con una salida para observar el paso migratorio desde Montes de Vitoria vimos una formación de unas 350 Espátulas que se movían hacia el sur en medio de un día oscuro, frío y lluvioso con nubarrones muy bajos. En Mendixur poca cosa fuera de lo normal salvo que no se vieron los Patos colorados y si un grupo de seis Tarros canelos que descansaban en la cola del embalse y se exhibieron sin pudor frente a nosotros con vuelo raso en formación.

Preparando la berrea sobre los lirios cortados

Hoy en el observatorio de los fresnos de Salburua: 50 – 60 Cigüeñas en reposo con alguna incorporación esporádica. Garzas reales y cuatro Garcillas bueyeras. Andarríos grandes, bastardos (4 -5), alguna Agachadiza, un Combatiente, un buen grupo de Chorlitejos grandes, Un par de Correlimos comunes, un Archibebe claro y un Correlimos menudo. Un grupo de unas 40 Avefrías, buen paso de Avión zapador y alguna Golondrina rezagada. Un Gavilán metiéndose con Lavanderas boyeras (flavas) y el Martín pescador con cara de que “esto me lo han cambiado”. Sigue el paso de Currucas capirotadas, Mosquiteros y Papamoscas cerrojillos.

Un abrazo. Ramón.

sábado, 11 de septiembre de 2010

MAREAS VIVAS


El nivel de las aguas del mar nunca permanece quieto. En su constante subir y bajar alcanza unos picos arriba y abajo, y son llamados pleamar y bajamar. Sabemos que las mareas se producen por la influencia gravitatoria del Sol y la Luna. En las fechas próximas al equinoccio y con la luna en fase llena o nueva, la influencia de los dos astros provocan las mareas de mayor desnivel. Es lo que se conoce como mareas vivas, en contraposición a las de menor diferencia entre los puntos de pleamar y bajamar, las mareas muertas.



Esto influye mucho en nuestras aves, especialmente para las que dependen, en mayor o menor medida, de la riqueza de las marismas intermareales. Este hábitat está considerado de los de mayor diversidad biológica y valor ecológico. No es casualidad que la migración se produzca en épocas equinocciales, ya que estas marcan el cambio de estación. Pues ya tenemos los ingredientes de este coctel que aquí presentamos: Marisma, Marea y Pájaros.


La bajamar deja al descubierto unas extensiones de limos que habitualmente permanecen bajo la lámina del agua. Paraíso de limícolas y de aquellos otros que buscan su alimento entre los canalillos que se forman en los terrenos de fango.


Pero deben aprovechar al máximo el tiempo, por que tras a penas unas seis horas de subida, el paisaje es completamente distinto. El agua lo cubre todo y cualquier islita se convierte en refugio a salvo de las aguas. Los que antes se diseminaban por una amplia extensión de terreno, ahora se ven obligados a apiñarse en unos escasos metros cuadrados.


Allí se entremezclan Chorlitejos grandes, Archibebes común y claro, Correlimos común, menudo, gordo y zarapitín, Andarríos chico y grande, y alguna que otra especie más como Agujas o Zarapitos. Si el refugio es reducido se palpa la tensión en el ambiente y son frecuentes los vuelos y los retornos a tierra firme.


Otros contemplan con aparente indiferencia estos vaivenes de las aguas y se entregan a sus quehaceres habituales, sin excluir el descanso. Desde el poderoso Gavión o las Pagazas piquirrojas y sus más estilizados primos los Charranes.



Para otras especies, finalizada la “parada y fonda”, es momento de continuar viaje, así elevan su vuelo por el cielo los bandos de Garzas, Garcetas y Espátulas.




Algunos como el Águila pescadora, las Águilas mejor dicho, deciden quedarse unos días más para disfrutar de nuestro entorno, para deleite de quienes las amamos.

Xabier

domingo, 5 de septiembre de 2010

HIGER y PLAIAUNDI

En ocasiones, por cotidiano y conocido, no somos del todo conscientes de la fortuna de tener tanta riqueza al alcance de la mano. El vértice del golfo de Bizkaia, la bahía de Txingudi, el estuario del Bidasoa y el paraje de Plaiaundi, son tan solo una parte de lo que nos ofrece nuestra Naturaleza más cercana.


El censo de marinas (RAM) de septiembre suele ser algo más animado de lo que la mañana nos ha deparado. Día veraniego cálido, luminoso con buena visibilidad aunque con calima a unas cuatro millas. Viento en calma o brisa suave a ratos, la mar tranquila pero con algo de fondo, con olas de medio metro que golpean las rocas del cabo Higer.
Entre las prendas de baño, emperchadas al sol, del camping del Faro, nos apostamos una vez más unos cuantos miembros de SEO Donostia, ópticas en ristre, dispuestos contabilizar a cuanta ave marina pasara por delante.


Posiblemente las excelentes condiciones metereológicas han propiciado que el flujo migratorio de las pelágicas estuviese fuera del alcance de nuestra vista. Así, nuestras magras anotaciones apenas recogen unos pocos Alcatraces, algunas Pardelas y poco más. Los que no fallaron fueron nuestros moñudos amigos, que al parecer han aumentado la familia.

Tras el “tradicional” refrigerio en el bar de las instalaciones, decidimos bajar a nuestro entrañable Plaiaundi. Allí ya pudimos disfrutar con los inequívocos preludios de la migración de las aves ligadas, en mayor o menor medida, a este ambiente estuarino.


Entre la mañana del sábado y jornadas anteriores, hemos podido observar una variada lista de especies. Avefrías, Avocetas, Cigüeñuelas, Archibebes común, claro y oscuro, Correlimos común, zarapitín, Temminck, gordo y menudo, Zarapitos real y trinador, Andarríos chico, grande y bastardo, Chorlitejo grande, Chorlito gris, Agachadiza común, Ostrero, Vuelvepiedras, Aguja colipinta y Combatiente.


Son casi un centenar las Espátulas que han pasado por aquí, donde las ardeidas van dejándose ver en mayor número, Garzas real e imperial, Garceta común, Garcilla bueyera y los crípticos Martinetes.


Fochas, Gallinetas y Rascones. No podía faltar el destello azul del Martín pescador. Gaviotas reidora, patiamarilla, sombría y cabecinegra, y algún imponente Gavión. También las anátidas empiezan a mostrarnos su variedad de especies, Ánades azulón, friso y silbón, Pato cuchara, Cercetas común y carretona.


Numerosos paseriformes, Currucas varias, Zarceros, Mosquiteros, Papamoscas cerrojillo y gris, Collalbas, Reyezuelo listado, Lavanderas y muchos más entre los pequeños alados.
Casi en otro extremo están las rapaces, Aguilucho lagunero, Busardo ratonero, Águila calzada, Alcotán, Halcón peregrino y Águila pescadora, con al menos tres ejemplares distintos controlados. El mismo sábado pudimos deleitarnos con dos ejemplares de manera simultánea.


Entre este sábado y sus vísperas, unos cuantos nos hemos acercado por estos espacios de la desembocadura del Bidasoa:
Txema, Joselu, Zuriñe, Jasone, Joseba, Javier, Iñaki, Ivonne, Ramón, Pedro C., Isabel y Xabier.