domingo, 5 de septiembre de 2010

HIGER y PLAIAUNDI

En ocasiones, por cotidiano y conocido, no somos del todo conscientes de la fortuna de tener tanta riqueza al alcance de la mano. El vértice del golfo de Bizkaia, la bahía de Txingudi, el estuario del Bidasoa y el paraje de Plaiaundi, son tan solo una parte de lo que nos ofrece nuestra Naturaleza más cercana.


El censo de marinas (RAM) de septiembre suele ser algo más animado de lo que la mañana nos ha deparado. Día veraniego cálido, luminoso con buena visibilidad aunque con calima a unas cuatro millas. Viento en calma o brisa suave a ratos, la mar tranquila pero con algo de fondo, con olas de medio metro que golpean las rocas del cabo Higer.
Entre las prendas de baño, emperchadas al sol, del camping del Faro, nos apostamos una vez más unos cuantos miembros de SEO Donostia, ópticas en ristre, dispuestos contabilizar a cuanta ave marina pasara por delante.


Posiblemente las excelentes condiciones metereológicas han propiciado que el flujo migratorio de las pelágicas estuviese fuera del alcance de nuestra vista. Así, nuestras magras anotaciones apenas recogen unos pocos Alcatraces, algunas Pardelas y poco más. Los que no fallaron fueron nuestros moñudos amigos, que al parecer han aumentado la familia.

Tras el “tradicional” refrigerio en el bar de las instalaciones, decidimos bajar a nuestro entrañable Plaiaundi. Allí ya pudimos disfrutar con los inequívocos preludios de la migración de las aves ligadas, en mayor o menor medida, a este ambiente estuarino.


Entre la mañana del sábado y jornadas anteriores, hemos podido observar una variada lista de especies. Avefrías, Avocetas, Cigüeñuelas, Archibebes común, claro y oscuro, Correlimos común, zarapitín, Temminck, gordo y menudo, Zarapitos real y trinador, Andarríos chico, grande y bastardo, Chorlitejo grande, Chorlito gris, Agachadiza común, Ostrero, Vuelvepiedras, Aguja colipinta y Combatiente.


Son casi un centenar las Espátulas que han pasado por aquí, donde las ardeidas van dejándose ver en mayor número, Garzas real e imperial, Garceta común, Garcilla bueyera y los crípticos Martinetes.


Fochas, Gallinetas y Rascones. No podía faltar el destello azul del Martín pescador. Gaviotas reidora, patiamarilla, sombría y cabecinegra, y algún imponente Gavión. También las anátidas empiezan a mostrarnos su variedad de especies, Ánades azulón, friso y silbón, Pato cuchara, Cercetas común y carretona.


Numerosos paseriformes, Currucas varias, Zarceros, Mosquiteros, Papamoscas cerrojillo y gris, Collalbas, Reyezuelo listado, Lavanderas y muchos más entre los pequeños alados.
Casi en otro extremo están las rapaces, Aguilucho lagunero, Busardo ratonero, Águila calzada, Alcotán, Halcón peregrino y Águila pescadora, con al menos tres ejemplares distintos controlados. El mismo sábado pudimos deleitarnos con dos ejemplares de manera simultánea.


Entre este sábado y sus vísperas, unos cuantos nos hemos acercado por estos espacios de la desembocadura del Bidasoa:
Txema, Joselu, Zuriñe, Jasone, Joseba, Javier, Iñaki, Ivonne, Ramón, Pedro C., Isabel y Xabier.

No hay comentarios:

Publicar un comentario