Nosotros,
como el resto de observadores que se asoman a la mar en busca del trasiego de
las aves marinas, ya sea por disfrute o censo de especies, siempre llevamos
junto a las ópticas la esperanza, más o menos razonable, de tener la ocasión y
la fortuna de toparnos con algún avistamiento poco frecuente. Una de esas citas
que guardaremos en la memoria, en el rincón de los momentos especiales y
bonitos.
Como
no se trata de crear expectación y suspense, la sorpresa no se trata de una
rareza, de un divagante de tierras (o mares) extraños y alejados, ni de una
especie excepcional por sus características. El encuentro, la sorpresa, ha sido
con una pareja de ornitólogos holandeses que han decidido plantar su tienda en
el camping de Higer, justo en el lugar desde donde cubrimos habitualmente los
censos RAM y Trektellen.
También,
todo hay que decirlo, hemos compartido censo con unos colegas llegados de Navarra/Nafarroa,
David e Iñigo, y el reencuentro con nuestra compañera Kristen, recién llegada
de su Dinamarca natal. No nos faltó ni la visita del también compañero y
navarro Javier Flandes, que tiene aún mucho más que contar de su reciente
estancia por tierras y costas noruegas. Doñana, Pirineos y costas portuguesas,
estaban presentes en los comentarios de recientes vacaciones. Vaya, que no solo
las aves que pudimos observar venían de lugares más o menos remotos.
Volviendo
a los ornitólogos holandeses, se llaman Coby y Jelle van Dijk, y no era
casualidad que su tienda estuviese enclavijada en nuestro cabo de Higer. Ya,
cuando llegamos a las 8, estaba Jelle con los prismáticos escrutando el
horizonte. Nos saludamos y en la breve presentación nos enteramos de que tienen
planificada una ruta costera por el Cantábrico, empezando por Higer y
terminando en el casi mítico, Estaca de Bares. Al comentar que hacíamos un
censo de aves marinas, la respuesta fue: Antonio Sandoval? Lo que da buena
muestra de que, cada vez más, la ornitología actual se enriquece con las
relaciones que superan fronteras e individuos. Claro, también le preguntamos
por Otto Overdijk, y es que los van Dijk son de Noordwijk, unos pocos
kilómetros al sur de las islas Frisias, que tanto significan para los que
tenemos debilidad por las Espátulas.
Los
chaparrones pronosticados no nos alcanzaron, estábamos 10 observadores y el
paso de aves no era desbordante, todo esto permitía cierto relax y propiciaba
el contacto humano. Así es como nos enteramos que Jelle y Coby realizan el
censo Trektellen en la costa de Noordwijk, con lo que sentimos ese puntito de
hermanamiento que da el saberse formando parte un gran equipo y proyecto. Los
datos: http://www.trektellen.nl/trektelling.asp?telpost=363&site=0&land=6&taal=5&datum=20130907
bando de 30 Avocetas |
Una
vez concluido el trabajo de campo, toca la tarea en el ordenador. Al rellenar
las fichas RAM y Trektellen, es inevitable intentar conocer algo más sobre
Noordwijk. En el mapa aparecen unas larguísimas playas que, en cierta manera,
nos recuerdan las de Les Landes. Un poco más zoom nos muestra un territorio de
complejos humedales que nos hacen “la
boca agua” con tan solo imaginar la riqueza ornitológica que deben albergar.
Buscando
en los archivos de Trektellen, en los datos de Noordwijk, nos encontramos con
que Jelle tiene una ficha que se remonta, ni más ni menos, a abril de 1969.
Para nosotros, que participamos en el proyecto desde finales de 2007, ha sido un verdadero
placer conocer a esta pareja neerlandesa y todo un privilegio haber contado,
compartido y participado con ellos, su experiencia y cordialidad, en este censo
de septiembre. Coby & Jelle, ya estáis en el rinconcito de la memoria que
decíamos al principio.
PD:
Desde el farallón, distancia y condiciones de luz, pocas veces permiten hacer
fotos de calidad de las aves marinas, pero ya solo la perspectiva del horizonte
merece la pena, especialmente cuando las nubes parecen surgir de la
incontenible creatividad de un genial artista.
Muy intereante desde luego...cuando el amor a las aves mas alla que simples plumas.
ResponderEliminarSaludos camperos!